Las extorsiones me dejaron en la ruina: Adrián Alarcón
Chilpancingo, Gro., marzo 21 del 2016 (IRZA).- "En Guerrero vivimos una situación caótica, ya que las organizaciones criminales trabajan en libertad, sin que ninguna autoridad les ponga un freno", sostiene Adrián Alarcón Ríos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex-Chilpancingo).
Alarcón Ríos señala que decidió asumir la dirigencia de la Coparmex en este municipio para defender a sus compañeros que al igual que él tienen una historia de horror.
Y recuerda lo que le ocurrió hace dos años cuando el crimen organizado comenzó a extorsionarlo, lo que "no le deseo ni a mi peor enemigo".
Refiere que hace dos años accedió a pagar una cuota a la delincuencia organizada para que lo dejaran trabajar, "pero esos individuos no tenían llenadera. Primero les entregué el dinero que habíamos convenido, pero después querían más".
Alarcón Ríos relata que pese a que les decía a los delincuentes que ya no tenía dinero para darles y que ya casi estaba en bancarrota, lo seguían por todas partes para seguir extorsionándolo, hasta que lo dejaron en paz cuando se dieron cuenta de que, efectivamente, ya estaba en la ruina.
Con un dejo de tristeza comentó que "lo que tenía era parte de un patrimonio que nos heredó mi padre".
"Cuando viví esa etapa de horror no podía dormir, porque temía que en cualquier momento llegaran los delincuentes para hacerme daño", refiere.
Sin embargo, añade, poco a poco logró estabilizarse económicamente con la ayuda de sus compañeros de gremio.
Dijo después que en Chilpancingo al menos medio centenar de empresarios ya cuentan con el permiso de la Secretaría de la Defensa Nacional para portar armas de fuego para autodefensa.
"Son armas de bajo calibre permitidas por la ley y sólo las vamos a usar para proteger nuestro patrimonio, y no para andarlas luciendo en las calles", asegura. (www.agenciairza.com)
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