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Necesario la reconciliación entre ganadores y perdedores: Iglesia Católica

Francisco Zorroza-SINCOMPU-Acapulco, Gro. 6 de febrero de 2011.-Luego de agradecer a los guerrerenses y a los diversos actores políticos y sociales por el esfuerzo hecho a favor del desarrollo tranquilo de los comicios, el arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos señaló que es necesario iniciar un proceso de reconciliación entre ganadores y perdedores, para construir consensos y buscar el beneficio común para todos los guerrerenses.
Tras emitir un mensaje momentos antes de su partida hacia Colombia, con la comisión episcopal  y social para recibir un taller sobre estrategias para la construcción de la paz, Garfias Merlos pidió a los actores políticos y a la población en general, formar parte de una gran reconstrucción social para hacerle frente a los problemas y desafíos de esta entidad, como son la pobreza extrema, la violencia, la inseguridad y el desempleo.
Ante la llegada de un nuevo gobierno a Guerrero, el prelado de la iglesia católica, consideró que es necesario iniciar ahora un proceso de reconciliación  entre las fuerzas políticas contendientes, con el fin de  construir consensos en torno a los planes del nuevo gobierno que deberá incluir propuestas de beneficio  real para la población, sobre todo para quienes viven en condiciones de mayor vulnerabilidad.
“Ganadores y perdedores, todos tenemos que sumarnos para hacerle frente al flagelo como la pobreza extrema, la violencia, la inseguridad, el desempleo y otros más; no es lícito quedarse fuera ni confrontar los esfuerzos que el nuevo gobierno haga para enfrentarlos”, instó el jerarca católico.
Indicó que toda la sociedad tiene que asumir la corresponsabilidad que le toca, tanto empresarios, organizaciones sociales, instituciones académicas y asociaciones religiosas; cada uno en el ámbito que le incumbe tiene que ofrecer su aporte específico a partir del marco de la ley.
Dijo que el nuevo gobierno debe de mantener una gran actitud de diálogo incluyente, para ofrecer la apertura y la disposición de todos los actores sociales y colaborar en la construcción de una sociedad más justa y pacífica.
Finalmente señaló que “es justo reconocer el gran mérito de haber concluido este proceso de forma pacífica hasta el reconocimiento casi unánime de los resultados de la elección”, expresó el arzobispo de Acapulco.