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Denuncian a la secretaria de Salud de negar medicamentos anticonceptivos

Gilberto Guzmán-SINCOMPU-Chilpancingo, Gro. 26 de noviembre 2010,-La Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México denunció que la Secretaría de Salud estatal (Ssa) incurre en “violencia institucional” contra las mujeres al negarles medicamentos anticonceptivos en hospitales y clínicas de salud, principalmente de la región Montaña y del Acapulco rural.

En conferencia de prensa que realizaron como parte de las actividades para conmemorar el Día internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres, integrantes de esa organización dieron a conocer los resultados de un estudio que evidencia la falta de métodos anticonceptivos en las instituciones del sector Salud ubicadas en las zonas señaladas.

Gadi Alelí Dircio, promotora de esta Red, dijo que pese a los esfuerzos institucionales y de organizaciones sociales, la violencia que la mujer sufre no solamente es física ni ocurre en su casa, también se ejerce en las calles y en ocasiones es institucional.

Mencionó que hay “violencia institucional” hacia ella y quien la ejerce es la propia Secretaría de Salud, al negarles el derecho a la anticoncepción, a pesar de que hay programas y recursos para la aplicación de distintos métodos.

Alelí Dircio mencionó que de acuerdo con un estudio realizado por la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México, cuando menos el 70 por ciento de las mujeres no tienen acceso a los métodos anticonceptivos y eso deriva en un gran número de embarazos no deseados.

Agregó que los integrantes de esa Red han iniciado una campaña de sensibilización en la región de la Montaña y en Acapulco rural, principales zonas con este tipo de “violencia institucional”, para que las mujeres aprendan a planificar el número de hijos que deseen tener, pero se han topado con la escasez de medicamentos anticonceptivos, aun cuando se sabe que la Ssa cuenta con un presupuesto para ello.

Al respecto, Nadia Maciel, también promotora  de la Red, informó que el organismo no gubernamental realizó un muestreo entre 198 mujeres de los municipios de Acapulco, Malinaltepec, Chilapa, Zitlala, Tlacoapa y Tlapa, cuyo resultado demostró que las mujeres no recurren a la anticoncepción ya no únicamente por su cultura y usos y costumbres, sino por la falta del material en los hospitales y centros de salud, así como por los múltiples requisitos que les piden para poder entregárselos.

Dijo que con el muestreo “se obtuvo que la prevalencia del uso de métodos anticonceptivos sigue siendo baja en Guerrero, pues sólo el 54.7 por ciento  de las usuarias reportaban haber empleado un método anticonceptivo en el último año”.

De igual forma, el estudio revela que el porcentaje de las mujeres que no quieren tener mas hijos es alto (47.9 por ciento) “aunque esto no necesariamente se traduce en un deseo de prevención o en el uso de métodos anticonceptivos”.

Cita que, por ejemplo en el municipio de Malinaltepec, donde las mujeres reportaron menor deseo de prevenir un embarazo y menor uso de métodos anticonceptivos (44 por ciento) la mayoría (88.9 por ciento) reportaron no desear tener más hijos.

El estudio revela también que existe una diferencia del deseo de prevención (58.1 por ciento)  y el uso actual de métodos anticonceptivos (47.9 por ciento) “lo que representa el 10.2 por ciento de demanda insatisfecha, siendo menor el porcentaje señalado  por el Consejo Nacional de Población (Conapo)  basado en la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) del 24.3 por ciento.

Sin embargo, en municipios como Malinaltepec y Tlacoapa la demanda insatisfecha es elevada: 22.2 por ciento  y 19.1 por ciento en comparación con otros municipios, según el documento.

Ante esos resultados, la Red recomendó a la secretaría de Salud, impulsar la difusión masiva de métodos anticonceptivos, ejecutar campañas de información específicas para población indígena, adaptadas a su contexto y lengua, y asegurar que cada unidad de salud cuente con personal de salud preparado en planificación familiar.

Además, se le recomienda a la dependencia capacitar a todos y todas las prestadores de servicios de salud, incluyendo a enfermeras y promotores en colocación de implante y vasectomía, así como incluir a la población masculina en las estrategias de difusión y sensibilización de planificación familiar, y asegurar una buena distribución de los insumos de métodos anticonceptivos.