Adolescentes desconocen cómo utilizar métodos anticonceptivos de manera correcta: Expertos
Leonardo Bastida Aguilar
En conferencia de prensa, con motivo de la inauguración del Curso Internacional “Salud Reproductiva de la Adolescente”, Josefina Lira Plascencia, primera secretaria del Colegio, explicó que en nuestro país, según estadísticas oficiales, de las casi 22 millones de personas adolescentes habitantes en la República Mexicana, 24 por ciento ya tiene una vida sexual activa y 51. 9 por ciento de las mujeres entre 10 y 19 años reportó haber tenido un embarazo, hecho que se traduce en que 17.3 por ciento de las mujeres con un bebé en México tenga entre 10 y 19 años de edad o que 77 de cada mil adolescentes haya quedado embarazada.
Al respecto, la jefa de la Unidad de Investigación en Medicina de la Adolescente del Instituto Nacional de Perinatología, comentó que cada semana 118 recién nacidos tienen como madre a una adolescente de entre 10 y 14 años, y siete mil 50, a una de entre 15 y 19 años, lo cual genera un acumulado de alrededor de 372 mil embarazos adolescentes al año. De estos, 50 por ciento no fue planeado, pero el otro 50 por ciento sí lo fue, según mediciones del Conapo.
Para la coordinadora del capítulo Ginecología de la Comego, estas cifras generan muchas preguntas como por qué la edad promedio de inicio de la vida sexual es de 14.6 años, a la cual, según una serie de entrevistas aplicadas a menores de 16 años, la mayoría (73 por ciento) indicó que por curiosidad y deseo; casi nueve de cada diez afirmó tener información sobre la sexualidad, la mayoría obtenida en la escuela, y aseguró haber disfrutado de su primer encuentro sexual (87 por ciento).
Con respecto al uso de métodos anticonceptivos durante la primera relación sexual, 38 por ciento indicó no usarlos por miedo, 33 por ciento dijo no planear tener relaciones sexuales, 18 por ciento pensó no quedar embarazada, 17 por ciento no sabía dónde conseguir un método anticonceptivo y 18 por ciento si quería embarazarse.
Algunas soluciones
A unos días del Día Mundial para Prevención del Embarazo No Planificado, 26 de septiembre, el grupo de expertos de la Comego consideró necesario trabajar en la capacitación a profesionales de la salud a fin de propiciar la generación de servicios de salud sexual y reproductiva amigables para la población adolescente y erradicar mitos como que éstos deben acudir al médico con sus familiares, ya que, desde el año pasado, la Norma Oficial Mexicana 047 plantea que se les debe otorgar la atención y consejería sin necesidad de ser acompañados por una persona mayor de edad.
Otro aspecto, señalaron, es el involucramiento de los padres y madres en las labores de prevención, pues según datos recopilados por la Comego, muchos médicos han reportado que los familiares son quienes no desean que en las consultas médicas de sus hijos o hijas se aborde el tema de la prevención del embarazo y el uso de métodos anticonceptivos.
Aunado a esto, indicaron como necesario reforzar el conocimiento sobre los métodos anticonceptivos entre las juventudes y fomentar la idea de que es mejor la utilización de un doble método, tanto el condón masculino como cualquier método femenino.
El mayor reto, afirmó Lira Plascencia, es el incrementar la educación sexual en las aulas escolares y otros entornos, ya que existe la disponibilidad gratuita de los anticonceptivos, pero las y adolescentes desconocen su uso correcto. Ejemplo de la importancia de la educación sexual, explicó, es el de casos como Suecia, país donde desde 1950 se comenzó a hablar de salud sexual en las escuelas, y hoy en día, sólo hay seis embarazos por cada mil adolescentes, es decir, 71 embarazos menos que en México.