Ex guerrillero y político colombiano no recomienda las autodefensas en México

Claudio Vargas/IRZA
Acapulco Gro., febrero 02 de 2016 (IRZA).- El ex guerrillero del M-19 y ex alcalde de Bogotá, Colombia, Gustavo Francisco Petro, se encuentra de vacaciones en Acapulco y concedió una entrevista a medios de comunicación en que afirmó que "las autodefensas no son el camino para traer la paz", pues la experiencia que vivieron en Colombia, donde más de 16 mil civiles estuvieron armados, "no trajo buenos resultados".
A un mes de haber dejado el cargo como alcalde de Bogotá, Francisco Petro, quien fue un ex miembro del Polo Democrático, partido de izquierda que abandonó para formar parte del Movimiento Progresista, además de ser un legislador de los mejor valorados en la historia reciente de Colombia, sostiene que con las armas en manos del gobierno se disminuye de manera considerable los índices de inseguridad, pero advirtió que esta medida no resuelve en su totalidad el problema.
Con una convicción que transmite con su tono pausado al hablar, el ex guerrillero habla del fenómeno de la violencia como algo de lo más normal, y la experiencia que vivió en Colombia le permite analizar el tema con soltura.
En su travesía por México, explica que hay una realidad paralela de nuestro país y Colombia, y que por eso busca trasmitir ciertas experiencias "sin convertirse en receta", pero que ayudaron en gran manera a resolver el problema de la violencia en Colombia y que pudieran servir en la república mexicana.
Puso como ejemplo que de 80 homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes en 1983 en Colombia, el mayor exportador de cocaína, se logró bajar a 17 asesinatos, lo que permite ver que si bien no se bajaron en su totalidad, las condiciones de seguridad para la gente fueron mejores.
En ese sentido, busca compartir esa experiencia con México y sus municipios, donde el problema de inseguridad es menor al que se vivió en Colombia.
-¿Acapulco es una ciudad violenta para usted?, se le preguntó al ex alcalde de Bogotá.
-Cualquier territorio se puede volver violento o pacífico, no importa el nombre de ese lugar, el asunto aquí es que el problema radica en la situación económica y las oportunidades que tenga la gente para mejorar sus condiciones y nivel de vida.

Reducir la pobreza, clave para reducir la inseguridad
Para el ex alcalde colombiano, el problema de la violencia se redujo sistemáticamente en Colombia "por una razón importante, porque logramos reducir el nivel de pobreza de un 50 a un 5 por ciento, y en este contexto, los sectores específicos discriminados son atendidos, lo que en consecuencia genera otra condición de vida".
"Por eso se logró bajar la tasa de homicidios de un 80 a un 17 por ciento. Ahora bien, si realmente se quiere mejorar la situación de inseguridad en este país y en este municipio, se requiere un gran pacto o alianza entre el gobierno, la infancia y la juventud, en la que dándole atención a sus necesidades de educación, condición económica y espacios de esparcimiento, logren apartarlos de ser presas de las mafias", agregó.
En ese sentido, sostuvo que si no se le da la atención a los que ahora son niños, en 15 años, serán esos mismo individuos quienes se convertirán en factores generadores de la violencia y, en consecuencia, habrá un repunte en los índices de inseguridad en los territorios donde viven.
Sin embargo, planteó lo siguiente: "Superar la segregación social, adaptar la ciudad al cambio climático y fortalecer el poder público después de dos décadas de política económica neoliberal, no es fácil. No se puede superar la segregación social sin un equilibrio entre la ciudad y la naturaleza. Justicia social y justicia ambiental van de la mano, para construir una sociedad más igualitaria y más democrática", concluyó. (www.agenciairza.com)