Debaten candidatos a alcalde de Acapulco entre señalamientos
Acapulco, Gro.- El debate de candidatos a la alcadía porteña se convirtió en desfile de buenas intenciones, propuestas sin profundidad y acusaciones directas entre Fermín Alvarado Arroyo y Luis Walton Aburto, aspirantes de las coaliciones Compromiso por Guerrero (PRI y PVEM) y Guerrero nos une (PRD, PT y MC), respectivamente.
El encuentro se efectuó de 9 a 11 de la mañana en el salón de un hotel de la zona Dorada ante unos 450 asistentes, al que tuvieron acceso militantes, políticos y socios de la Asociación Civil Acapulco, organismo organizador de la actividad.
El encono entre los aspirantes punteros se repitió afuera del recinto, donde unas 350 personas, en su mayoría simpatizantes del Revolucionario Institucional y Movimiento Ciudadano, entre porras y banderas, se arremolinaban inútilmente en busca de ingresar al salón del debate.
La conglomeración provocó una riña entre seguidores de ambos bandos que fueron separados por otros militantes.
Adentro, Walton Aburto y Alvarado Arroyo se enfrascaron en un ríspido encuentro de señalamientos mutuos, aplausos y abucheos de sus seguidores .
"Nunca había visto Acapulco en el desastre en que se encuentra; el municipio se ha descompuesto día a día; es un desastre, una corrupción en todo", espetó el candidato de las izquierdas al referirse a la administración saliente heredada por el ex alcalde priísta Manuel Añorve Baños, quien pidió licencia para buscar una diputación federal plurinominal.
Walton Aburto propuso fortalecer la industria turística y señaló que "el problema del agua es terrible, pero también la inseguridad". Recordó que "el pasado candidato del PRI ofreció agua para todos, ahora hay colonias con tres y cuatro meses sin servicio, es grave que la Federación tenga intervenida de la Comisión de Agua por una deuda de 90 millones de pesos".
Reprochó que la esposa del aspirante del PRI, la regidora Olga Salmerón, aprobó en cabildo endeudar al municipio a través de un préstamo de 150 millones de pesos. Criticó que la administración saliente hizo crecer la nómina de 600 a 800 millones de pesos mensuales, mientras que el gasto de publicidad se incrementó de 32 a 80 millones de pesos de 2008 a la fecha, por lo que se comprometió a no encabezar "un gobierno de íntimos amigos".
El priísta Alvarado Arroyo manifestó que "le recordaré a Walton que yo sí tengo a una dama al lado mío, yo sí tengo quien me acompañe"; y llamó a su adversario "el candidato del no".
Esgrimió su experiencia en diversos cargos de la administración pública como su mejor argumento para gobernar Acapulco. El priísta señaló que "parece que el señor Walton vino a linchar un gobierno que todavía no encabezo, cuando sea presidente voy a ser responsable de mis actos".
Propuso transformar la coordinación de servicios públicos municipales y solucionar el problema del abasto de agua a través de una reingeniería del organismo operador. Recalcó que él sí podrá generar inversión, como lo hizo cuando fue legislador federal, e insinuó que Walton Aburto sólo se presentaba a cobrar cuando fue senador.
La candidata panista Digna Marroquín Cisneros, expuso su origen humilde y experiencia en cargos institucionales como líder sindical del Instituto Mexicano del Seguro Social. En el tema de seguridad, defendió las propuestas de Josefina Vázquez Mota e intentó entrar al debate al criticar la falta de transparencia en la administración municipal. Advirtió que la Comisión de Agua está destinada a la quiebra, pues enfrenta un déficit mensual de poco más de dos millones de pesos, mientras que transportar el metro cúbico del líquido cuesta 10 pesos, cuando debería costar 6.5 pesos.
Criticó los recursos destinados al uso de los regidores y recriminó la abultada nómina del ayuntamiento, valuada en 700 millones de pesos mensuales. Mientras que Carlos Reyes Paris; aspirante del Panal, se presentó como licenciado en turismo y piloto aviador; convocó a explotar el potencial del magisterio en busca de mejorar la calidad de vida de los habitantes, a crear un rastro, a defender la ecología y sanear la administración, mediante la eliminación de diezmos. (Jornada)
