Lopez Obrador en gira por Iguala ofrece no traicionar a México.
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También recomendó a sus simpatizantes de la entidad no ver como enemigos a los panistas y priístas, porque ellos "no tiene la culpa de la pobreza que se encuentra el país, sino los que están arriba".
Sostuvo que muchos panistas y priístas "van a votar por nosotros" y aseguró que en Guerrero lleva 10 puntos de ventaja sobre su contrincante el candidato del tricolor, Enrique Peña Nieto.
En su visita a esta ciudad, se concentraron cientos de simpatizantes de varios municipios de la zona Norte y de la entidad, que lo esperaron en la avenida Bandera Nacional a una cuadra el zócalo. López Obrador descendió de su vehículo blanco y de inmediato se abalanzó la muchedumbre para saludarlo, abrazarlo, entregarle demandas y reclamos del PRD. Llegó hasta el templete que quedó justo en medio de la vía y de inmediato dio su discurso.
"No tenemos resentimiento con nadie, lo único que queremos es justicia y no venganza, porque el pueblo es mucha pieza y es cosa de que entendamos que se tiene que hacer un verdadero cambio", reiteró.
Justificó que los militantes del PRI y PAN también sufren las decisiones de los "de arriba" y ejemplificó: "hoy subió la gasolina y les pega por parejo a todos"; entonces "no hay por qué tener las diferencias porque les aseguró que muchos de esos partidos, van a votar por nosotros sin dejar a sus institutos".
Entre los compromisos que hizo están bajar los salarios a los funcionarios que ganan más de 200 mil pesos mensuales; combatir la corrupción en Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y ofreció no traicionar al pueblo: "Voy a gobernar con honestidad, encabezando un gobierno justo".
Recordó las tres transformaciones que ha tenido el país: la Independencia, la Reforma y la Revolución, las cuales "tienen mucho que ver con Guerrero".
"No se puede entender la historia de México, sin la historia del pueblo de Guerrero –afirmó–, aquí siempre los habitantes han estado adelante".
Solicitó en tres puntos orientar a la gente para que no vendan su voto, avanzar como protagonistas del cambio verdadero y ayudar a cuidar las casillas para que no ocurra lo de 2006.
En cuanto al gobierno federal, López Obrador denunció que más de 3 billones 700 mil pesos se pierden por la burocracia y por pagar sueldos elevados a funcionarios que no cumplen con su responsabilidad.
Criticó a los diputados, senadores y los ministros, a quienes los acusó de tener los sueldos más altos del mundo.
Referente al tema de la inseguridad, el candidato presidencial dijo que ese factor existe porque no hay trabajo y se abandonó a la juventud.
En modo sardónico se refirió al abucheo que tuvo el priísta Peña Nieto por estudiantes de la Universidad Iberoamericana y lo comparó con Gustavo Díaz Ordaz por aceptar la responsabilidad de lo sucedido en San Salvador Atenco, con la masacre del 2 de octubre de 1968.
Miles reciben al candidato
Acompañado de Sofío Ramírez Hernández y de Armando Ríos Piter, candidatos al Senado de la República y otros abanderados a diputados locales y dirigentes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y de los partidos que integran al Movimiento Progresista, el abanderado de las izquierdas aseguró que en una de las encuestas realizadas en Guerrero aventaja con 10 puntos a su más cercano adversario.
En una tarde calurosa, pero con el ánimo que coreaban los miles de seguidores, López Obrador afirmó que en menos de 60 días será presidente electo de los mexicanos y agregó que en los primeros seis meses de su gobierno estaría generando millones de empleos para todos los jóvenes mexicanos.
Dijo que sus adversarios representan más de lo mismo, inseguridad, corrupción y más pobreza, mientras que su movimiento encarna mejores condiciones de vida y su meta principal es acabar con la corrupción, "porque ese problema ha dado al traste. México es un país rico, pero con pueblo pobre. Eso se tiene que acabar".
Cuando se refirió a la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo Morales se escuchó una rechifla de los asistentes. "Ya sé que no la quieren, pero ella no manejará la educación", dijo.
Agregó que tiene conocimiento que Gordillo tiene un acuerdo con el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, que si gana la presidencia ella será la secretaria de Educación, "pero eso no sucederá".(la jornada)
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