Esperanza y hartazgo, reciben a AMLO en Guerrero

Por: Rosalba Ramírez

Dos ancianos se apresuran corriendo hacia la cancha principal de Tlapa de Comonfort, municipio de la región de la Montaña de Guerrero. Pareciera como si les hubieran regresado la vitalidad de unos jóvenes de 20 años. Se han enterado que Andrés Manuel López Obrador entregará las primeras pensiones a discapacitados.

Se observa esa escena decenas de veces. Los ancianos corren, los indígenas terminan sus escritos que pretenden hacer llegar a Obrador en dónde le solicitan apoyos económicos para aperturar un negocio o para la compra de ganado y siembra.

Desde las once de la mañana, seis horas antes de que arribe el ejecutivo federal, se instalan al menos dos filtros de seguridad escuetos, integrados por policías estatales y Ejercito. No hay revisión de bolsas, ni vallas que separen, ni detectores de metales. Dejan pasar primero, a gente en silla de ruedas, luego vienen las madres con niños en brazos, y después, ya abalanzados en la puerta, entran todos de a montones, de empujones, como pueden.

- Es una de las beneficiarias, déjenla pasar, grita una mujer con uniforme caqui apostada en la entrada.

No cabe duda. Es el gobierno en el que la sociedad puso la esperanza. La esperanza de los ancianos por morir en mejores condiciones, de los jóvenes por tener mejor futuro, de las madres solteras por darle una calidad de vida a sus hijos, de las policías comunitarias que quieren ver libres a sus presos, de los jóvenes sin empleo, de los indígenas que buscan reconocimiento.

Ya adentro, cientos hacían filas para que de los diez jóvenes que realizaban "el censo para el bienestar", les tomaran sus datos. Eran indígenas provinientes de Alpoyeca, Atlixtac, Coachapa el Grande, Huamuxtitlán, Olinalá y Tlalixtaquilla, entre otros.

La tarde se nubló, nadie parecía desesperado porque no llegara Obrador pese a llevar casi dos horas de retraso. Era, en mi definición, el Woodstock o Coachella de los adultos mayores, de los indígenas que se apoderaban de las sillas en primeras filas, de los rincones con pasto en dónde se sentaron a platicar como si el tiempo fuera eterno; ahí esperaron a que llegara su rockstar que no necesitó tomar una guitarra para recibir porras, sino que reiteró las promesas que hizo en campaña.

Para quienes no alcanzaron a observarlo de cerca, dos pantallas grandes -al frente y al final de la cancha- fueron colocadas. Mientras se abría paso por los asistentes, AMLO recibió cobijas y petates de mano de los indígenas.

Llegó el turno del discurso del gobernador priista de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, a quien recibieron con abucheo, calificativos de "asesino" y gritos de "fuera" y "bájate". Con aplomo, el mandatario trató de continuar, pero los presentes no lo dejaron por lo que tuvo que intervenir AMLO.

- Amigas y amigos de Tlapa, hay que portarnos bien, ya acabó la campaña ahora es el gobierno y tenemos que ser respetuosos de las autoridades, no se resuelve nada a gritos y sombrerazos, dijo Obrador y puso a votación la continuidad del discurso del mandatario estatal. La votación de los presentes fue que no querían que siguiera hablando pero AMLO dijo que había sido un empate. Astudillo terminó su participación.

Entregaron de manera protocolaria los apoyos a dos beneficiarios de 3 y 6 años de edad y llegó el discurso de Obrador. Comenzó diciendo que conocía todos los municipios de Guerrero tras haberlo recorrido en 1996.

"Vengo a reafirmar los compromisos que hemos hecho, vamos a cumplir no les vamos a fallar al pueblo. Vamos a atender a todos, vamos a escuchar y a respetar a todos pero le vamos a dar preferencia a los humildes porque por el bien de todos, primero los pobres".

"Ya comenzó la cuarta transformación del país, tenemos que hacer realidad el cambio, nada de simulación, no es cambio de gobierno, es cambio de régimen, es acabar con el principal problema de México: la corrupción", continuó.

Puso como ejemplo que el año pasado, aún en el período del expresidente, Enrique Peña Nieto fueron robados 65 mil millones de pesos en combustible a través del huachicol.

A los maestros de la Montaña, les dijo que ya revisa la cancelación de la Reforma Educativa y a los productores del campo, que recibirán apoyo cada seis meses así como el fertilizante que será entregado gratuitamente.

A los adultos mayores, les reiteró que recibirán el doble de apoyo económico. "Está costando un poco aplicar estos programas y por ello se hace un censo para evitar intermediarios".

Del sistema de salud reconoció que no hay medicamentos ni doctores, y que por el contrario, centros de salud y hospitales están abandonados, se comprometió a garantizar la atención médica y el abastecimiento de medicamentos. "Eso nos va a llevar algo de tiempo pero vamos a mejorar el sistema de salud".

"Tengan me paciencia porque dejaron completamente destruido el país. El gobierno anterior no estaba destinado a apoyar al pueblo, era un facilitador de la corrupción. Tenemos que volver a rehacer el gobierno".

Comprometió reuniones cada cuatro meses visitando distintos pueblos de Guerrero y afirmó que "Vamos a saber qué pasó con los 43 normalistas".

En medio de exigencias por la libertad de presos políticos por parte de integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC- PC), porras y gritos de exitación, terminó el arranque del programa "Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad".